Para nadie es un secreto que a los niños nos les agrada comer verduras, en especial si estas son de color verde. Las verduras son alimentos esenciales que deben estar incluidas en la alimentación diaria,  ya que contienen vitaminas, minerales y alto contenido de fibra, además de ayudar al crecimiento. Que tus hijos coman verduras tiene muchos beneficios, por eso es importante que las agregues en cada comida durante su desarrollo ya que protegen su sistema inmunológico y les ayudarán a tener más vitaminas y defensas, tendrán un cuerpo saludable y serán más fuertes frente a enfermedades o infecciones. Otro beneficio de las verduras, es que puedes agregarlas en cualquier platillo por su versatilidad y están disponibles en cualquier época del año.

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Beneficios de comer verduras:

• Son los alimentos que más agua proporcionan al cuerpo
• Son fuente de vitamina C: esta vitamina conserva los vasos sanguíneos y ayuda a sanar las heridas, se encuentran en el pimiento rojo y la col verde.
• Carecen de grasas: tienen un alto nivel de proteína y fibra además su contenido es bajo en colesterol y esto reduce enfermedades cardiovasculares.
• Aportan magnesio: este no lo produce el organismo por eso la importancia de ingerirlo, el consumo de este mineral, reduce la fatiga, ayuda a un mejor descanso y alivia dolores musculares y espasmos. Se encuentran en la espinaca y el brócoli.
• Contienen potasio: ayudan a eliminar el exceso de líquidos. Se encuentra en el aguacate y el apio.
• Incluyen antioxidantes: estimulan el sistema inmunológico, protegen la piel del envejecimiento prematuro y combaten las infecciones. Se encuentran en la mayoría de vegetales con hojas verdes (hierbas y especias)

Existen muchas formas de prepararlas para que se vean deliciosas para un niño, la lechuga o el tomate puedes agregarlos al sandwich que lleva a la escuela con su ketchup favorita, pero ¿qué hacer a la hora del almuerzo o la cena?

5 formas diferentes para que tus hijos coman verduras:

1. Verduras en puré: deshacer los vegetales o camuflar las verduras ayudará a que se vea más apetitoso ya que las mismas estarán lejos de su forma original y será difícil identificarlas para un niño.
2. Combinarlas con carne: las brochetas son un platillo ideal porque combina carne y verduras además puede ser innovador y curioso para un niño porque se puede comer sin necesidad de usar un plato.
3. Participación: hacer que tu hijo participe en las compras, siembra o en la cocina a la hora de hacer las verduras puede motivarlo a comerlas.
4. Verduras y fantasía: “las espinacas le dan fuerza a Popeye”, contar cuentos o historias que involucran a su personaje favorito con verduras hará que los niños se sientan identificados.
5. No obligarlos: es importante que la hora de la comida sea un momento tranquilo y ameno para que tus hijos puedan comer sin sentirse irritados.

Sin duda no será un trabajo fácil hacer que tus hijos coman verduras, pero si empleas el combinar los vegetales con otros alimentos que les agraden, cuentos y actividades dentro de la cocina o la mesa, podrás lograrlo y ellos tendrán muchos beneficios en el futuro.

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